Limites y Berrinches
- Diego Piñeyro
- 26 feb 2017
- 1 Min. de lectura

Hablar de limites es enseñar que no todo es posible. Contiene y organiza.
Transmitir desde el mundo adulto que hay normas de convivencia social, es fundamental para la construcción de la personalidad del niño en las diferentes etapas de crecimiento.
Una norma es “Lo que se puede” y “lo que no”, adecuando esto a cada familia y modo de vivir, dándole la impronta cultural desde donde ese niño nace, crece y se desarrolla hacia la adultez.
Lo recomendable, siempre que se establezca un limite, es que sea claro, posible y con una duración determinada; de esta manera se evitan las generalizaciones “siempre te digo….”, “nunca vas a hacer caso…..” y los mensajes confusos o de difícil cumplimiento como “No vas a jugar más…..” o “Por tres meses no vas a ver la TV…..”.
Cuando se enseña un limite, debe ser de una manera cariñosa, reflexiva y firme; evitando las contradicciones y ejemplificando lo que se busca, para que el niño incorpore a su pensamiento, que se le está fijando una regla de comportamiento. De esta forma, se desarrolla la capacidad de espera y la tolerancia a la frustración.
Como ultima reflexión, el limite debe ser dado con paciencia y constancia, de manera repetitiva y siempre considerando la edad del desarrollo y crecimiento de ese niño al que se le enseña a vivir en el mundo.
Bibliografia
Limites en la infancia…..SAP - Comunidad SAP
La importancia de poner limites…..Secretaria de Niñez, Infancia y Adolescencia. Provincia de Córdoba
Imagen - Francesco Tonucci (1975)
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